Jesucristo, fusiliado el 3 de mayo de 1808
Ya he comentado otras veces que las obras de arte, las grandes obras de arte especialmente, tienen un incontable número de detalles que no suelen ser casualidad, sino que son guiños o mensajes no tan obvios que el autor dejó ahí plasmados. Por ejemplo, no hace mucho comentábamos como Vermeer había dejado un clavo en …