Isaac Newton y la peste, una pandemia que cambió la ciencia

Isaac Newton y la peste, una pandemia que cambió la ciencia al mandarlo a casa y dejarle tiempo para lo que le interesaba

No hace mucho les hablaba sobre el año milagroso de Albert Einstein, en el que publicó varios artículos sobre temas distintos, que se han mostrado claves en la historia de la física. Algo parecido ocurrió con otro de los gigantes de la física. Y lo llamo así también por aquella polémica del caminar a hombros de gigantes de la que fue protagonista. En 1665, una devastadora peste azotó Inglaterra, impactando significativamente en la vida de Isaac Newton. Este período de aislamiento fue crucial para sus descubrimientos en física y matemáticas. Fue un catalizador para los revolucionarios descubrimientos de Isaac Newton.

Isaac Newton y la peste, una pandemia que cambió la ciencia al mandarlo a casa y dejarle tiempo para lo que le interesaba

La Gran Peste de Londres, parte de una serie de epidemias que asolaron Europa, tuvo un efecto considerable en la sociedad, que, como ocurrió hace 3 años con el COVID-19, obligó a tomar algunas medidas drásticas. Entre ellas, la interrupción de estudios en la Universidad de Cambridge, donde Newton se estaba formando. La universidad cerró temporalmente debido a la peste, y Newton volvió a su pueblo natal, Woolsthorpe.

Seguramente la tranquilidad de no tener obligaciones, ni fechas que marquen un calendario, ni una expectativa concreta de vuelta al trabajo en la universidad, hizo que Newton se relajara y dedicara el tiempo a lo que le apetecía. Sin pensar en mucho más. Y eso fue especialmente fructífero.

Newton ya había mostrado un profundo interés en las leyes del movimiento y la teoría de la óptica, el color y las matemáticas, pero sus logros más significativos aún estaban por llegar. Durante el aislamiento en su pueblo natal desarrolló las bases del cálculo, formuló sus leyes del movimiento y la gravedad y comenzó a desarrollar su teoría de la óptica. Es un periodo que podríamos denominar como su Annus Mirabilis, su año milagroso. No todas sus nuevas ideas vieron la luz en ese momento, pero en ese año y medio de aislamiento Newton sentó las bases de algunos de sus contribuciones más importantes.

Según parece, la idea de la gravitación universal tomó forma en la cabeza de Newton en aquellos meses de 1666. Eso sí, durante los años siguientes trabajó en ella lo suficiente como para hacer cálculos y poder hacerla pública de manera sólida en 1687, que fue el año en que publicó su Philosophiæ naturalis principia mathematica.

Los trabajos de Newton durante la peste cambiaron fundamentalmente la física y la matemática

Los descubrimientos de Newton durante este período no solo marcaron el inicio de la historia de la ciencia moderna, sino que también transformaron nuestra comprensión del universo. Los trabajos de Newton durante la peste acabarían cambiando de manera fundamental la física y la matemática.

Durante su tiempo en Woolsthorpe, Newton también experimentó con la óptica, descomponiendo la luz solar con un prisma y formando la base de la moderna comprensión del espectro de colores. Estos experimentos fueron fundamentales para el desarrollo de la teoría de la luz y el color.

Como vemos, a veces no hay nada mejor que darse libertad para pensar y hacer lo que a uno le apetece, para acabar llegando a grandes sitios. Otras veces, esa libertad hace que se nos pase el tiempo pajareando y no lleguemos a nada. En definitiva, que bien puede ser una cosa como la otra.

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