
Durante la Segunda Guerra Mundial, y no sólo en esta guerra, los recursos destinados a la industria bélica hicieron que escasearan multitud de productos, en muchos casos, por no haber materias primas con qué hacerlos. No es esto nuevo en Curistoria, pero hoy vamos a ver el caso opuesto, qué pasó con las cantidades enormes de material bélico tras la guerra, en este caso, cascos.
Como ejemplos de lo primero, la escasez de recursos, tenemos aviones hechos de madera, que en el Pentágono de Estados Unidos no haya mármol, que el suelo del Boston Garden fuera tan característico, el origen de Nutella o historias sobre las vallas en los parques de Londres. Como ejemplo de la saturación de objetos militares tras la guerra, tenemos un vídeo que nos muestra qué se hacía con los cascos de acero alemanes después de la Segunda Guerra Mundial, supongo que entre otras cosas. Aquello que había protegido miles y miles de cabezas, ahora servía para fabricar utensilios de cocina.
Como pueden ver en el siguiente vídeo, con un poco de trabajo hidráulico y unos remaches aquí y allá, las toneladas de acero en forma de casco se convertían en cazuelas, algo mucho más necesario en la Alemania de postguerra que los cascos, Stahlhelmet para ellos.
Pues yo tengo un amigo que colecciona cascos y aún tiene alguno de éstos…
Tengo 1 de aleacion de aluminio te animas a preguntarle a tu amigo si tiene historia de q se hallan hecho de aluminio
Tariel, esos que fueron convertidos en utensilios de cocina serían los cascos que tenía el ejército alemán en su poder y en sus fábricas. Los que quedaron por toda Europa o en poder de cada soldado, supongo, son los que se compran y venden, y los que están en museos.
Gracias por comentar.
Saludos.