La gran evasión de Sevilla

Todos conocemos la magnífica película “La gran evasión”, que narra cómo escapan, con más o menos suerte, algunos soldados de un campo de concentración nazi. Pues en Sevilla, en el siglo SVII ocurrió algo similar, y como veremos los sevillanos ya usaron trucos que se ven en la película e incluso fueron más ocurrentes en algunas cosas. Por lo tanto, cambiemos el campo de concentración por una cárcel y los soldados aliados por un grupo de presos de la justicia.
Todo comenzó con la búsqueda de un cómplice exterior que alquilara una habitación junto a la cárcel, de tal forma que esta y aquella estuvieran separadas únicamente por una pared. Una vez cubierto este punto, comenzó el método clásico de evasión por un túnel, con la construcción del mismo. Al igual que en la película de la Segunda Guerra Mundial, los presos de la cárcel sevillana usaban sus ropas, en este caso los sombreros, para sacar los escombros que producía la construcción del túnel poco a poco y los iban depositando en el basurero comunal.
Una vez finalizado el túnel, sólo quedaba encontrar el mejor momento y forma para “desfilar”. Y este momento sería el día de San Juan, en el que había lugar algunas celebraciones. Durante esta fiesta, y a pesar del calor sevillano, los presos comienzan a bailar a las cañas. Esto debía ser algo normal en la cárcel en días de fiesta y claro, el baile provocaba cierto movimiento en el patio y un poco de jaleo. Los presos que estaban “en el ajo”, aprovechaban el baile para entrar disimuladamente en la habitación conectada con el exterior y salir zumbando de la cárcel, a la que intuyo no tardarían en volver por nuevos actos delictivos.
Pero claro, llegó un momento en que aquello se volvió sospechoso y el alcaide se dio cuenta de aquella sala en la que entraban algunos presos era un sumidero y todo el que entraba, no volvía a salir. Aquí comenzó la alarma, los alguaciles corrieron prestos y vieron el boquete en la cárcel por el que se habían escapado nada más y nada menos que unos 40 presos.

2 comentarios en “La gran evasión de Sevilla”

  1. «y salir zumbando de la cárcel, a la que intuyo no tardarían en volver por nuevos actos delictivos.»

    si claro! todos eran villanos sin remisión y culpables solo por nacer, claro! como todo el que esta en la cárcel es culpable y todos los que están fuera inocentes…JAJAJAJA

    Que bonito vivir en democracia, JA!

  2. Hola amigo:

    hay que tener en cuenta el contexto histórico, que en aquellos tiempos la democracia estaba lejos y la pobreza cerca, y no todos en la cárcel eran malos (aunque muchos habría, fijo, igual que ahora) sino que la vida a veces te pone en situaciones que… Vamos, como dice la canción «si naciste para martillo del cielo te caen los clavos». Podrías estar en la cárcel simplemente por hablar a destiempo, por ejemplo.

    Y lo peor de todo es que, como dices irónicamente, no todos los malos estaban dentro. Ni entonces ni ahora, lamentablemente.

    Por cierto, sí que es bonito vivir en democracia 🙂

    Saludos.

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