La batalla de Las Navas de Tolosa, hecho clave en la lucha de los cristianos por reconquistar la península, tuvo lugar en 1212, por lo que este año se celebra su octavo centenario. No es la primera vez que hablamos en Curistoria de esta batalla, pero hoy vamos a centrarnos en un espisodio que, todo sea dicho, tiene su parte de leyenda.
La leyenda de El pastor de Las Navas de Tolosa asegura que la colaboración de un hombre, un pastor de la zona, fue crucial para el éxito de la batalla. Según parece, este guió el día anterior a la batalla a las tropas cristianas de Alfonso VIII hasta un buen lugar cerca del campamento musulmán, lo que tuvo un impacto importante en el combate. Un camino, conocido por pocos y por supuesto desconocido para los guerreros que no pertenecían a la zona, a través de Sierra Morena, fue el utilizado por el pastor para ayudar a los cristianos. Los almohades dominaban los pasos y cortaban así el camino a los cristianos. Entonces, Martín Halaja, como según parece se llamaba el pastor, ayudó a Diego López de Haro y otros caballeros a cruzar el puerto de la Losa y así las tropas cruzaron sin peligro y pudieron desplegarse en el flanco occidental musulmán, en un llano conocido como la Mesa del Rey.
No hay datos históricos ni pruebas irrefutables que lleven a confirmar la identidad o la existencia del pastor, pero la leyenda está ahí y es bien conocida. De hecho, algunos llegaron a afirmar que aquella ayuda provino nada más y nada menos que del mismísimo San Isidro, personalizado en aquel hombre que se ofreció a ayudar a los cristianos en una de las batallas clave de la Reconquista.
En la imagen de la entrada pueden ver el monumento que en La Carolina, Jaén, muestra precisamente al pastor mostrando el camino a los reyes cristianos.
Fuente: Grandes batallas españolas, de Juan Vázquez y Lucas Molina.
Si en vez del pastor hubiera sido Curro Jiménez (dejando de lado fechas) la historia habría adquirido unos matices "curiosos"
La revista "QUO" de este mes de junio publica un reportaje al respecto que recomiendo a los amantes de este tipo de historias.
Trata de manera amena y completa la batalla de las Navas con pequeñas anecdotas como la que refieres.
Seguro que en la época de Curro Jiménez, también hay casos similares entre nuestras tropas y los franceses.
Gracias por la info sobre Quo.
Saludos.
De nada. Aunque como esto de blogger está alterado ultimamente, no aparecía pero la información del QUO era mía.
Gracias Trecce, por el comentario y por identificarte :)