El bazooka era un instrumento musical

bazuca el instrumento musicalBob Burns, un americano nacido en agosto de 1890, fue un comediante famoso durante los años 30 y 40 del siglo XX, pero además, fue también un militar. Músico desde que era un jovencito, le gustaban especialmente el trombón y la corneta, y a los 13 años ya tenía su propia banda.

Un día cogió una tubería de gas y sopló por ella produciendo un extraño sonido. Siguió trabajando en el instrumento y acabó poniendo al final de la tubería un embudo. Con esto era capaz de producir un sonido parecido al de un saxo, con un rango de seis notas. Sus representaciones con el instrumento eran toda una atracción por la mezcla de comicidad y de virtuosismo de jazz.
Durante la Primera Guerra Mundial formó parte del Cuerpo de Marines y viajó hasta Francia para combatir. Siendo sargento, formó la banda de jazz del cuerpo de marines y comenzó a usar su invento personal: la tubería con el embudo al final. Después de la guerra, se paseó por las radios de EEUU tocando música.
Y cuando llegó la Segunda Guerra Mundial, el ejército de los EEUU comenzó a probar una nueva arma antitanque que se apoyaba en hombro del soldado para disparar. Era el M1A1. Los soldados que estaban probando el arma conocían el instrumento musical de Burns y concluyeron que las similitudes en las formas de ambos eran sorprendentes. Y así, comenzaron a llamar a aquel M1A1 como Burns llamaba a su invento musical: Bazooka. Y así, lo que todos hoy conocemos como bazuca o bazooka (en su versión inglesa), debe su nombre en realidad un instrumento musical que no era más que una tubería de gas con un embudo al final.

Fuente: The greatest war stories never told, de Rick Beyer

Imagen tomada de www.CaptainKazoo.com

4 comentarios en “El bazooka era un instrumento musical”

  1. Realmente no hace falta que pongas M1a1, por que se le llama bazooka desde el modelo M1 a secas. Despues hay otros modelos como el A1 al que también se le llamarón bazooka, hasta llegar al M20, al que se le llamó superbazooka.

    Un saludo y genial entrada, como la mayoría de las demás!

  2. ESto… mi fuente, citada en el artículo, es: The greatest war stories never told, de Rick Beyer.

    El enlace que pones es de un artículo posterior al mío y no sólo eso, sino que me cita como fuente del artículo.

    Pillín soy, sí, pero no por esto.

    Saludos.

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