Estoy leyendo un magnífico libro sobre los persas, escrito por Lloyd Llewellyn-Jones (enlace afiliado), recién… Leer más
La censura ha existido desde el principio de los tiempos, o al menos desde que… Leer más
A finales del siglo XIX, haber creado la tabla periódica permitió a Mendeléyev tener una… Leer más
El escándalo del Watergate tuvo lugar en los primeros años de la década de los… Leer más
Jacobo II fue rey de Escocia desde 1437 hasta su muerte en 1460. Había nacido… Leer más
Desde hace unas semanas podemos leer el último libro, hasta ahora, de Gabriel García Márquez.… Leer más
Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando este sitio web, aceptas su uso. Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta nuestra política
Más info
Ver comentarios
1823. Felicidades por el blog. Me encanta.
Me encanta el blog, pero en está entrada el año está confundido.
Saludos.
Gracias por el aviso en la errata, ya está solucionado :)
Saludos.
Fernando VII, ese gran rey... Entre él y su padre hundieron a España.
Y se quedaron hasta 1.828 creo, no fuera a ser que otro militar proclamará la libertad constitucional...
Lo de Fernando VII tiene, sin duda, un tremendo mérito. Ser el más nefasto, impresentable, canalla y cretino entre la lista interminable de reyes que ostentan orgullosos tales adjetivos es realmente digno de ser destacado.
Tendría que haber sido fusilado por alta traición a España.
Gracias por los comentarios.
Lo de Fernando VII es un mérito que alguno debía asumir. Algún rey debía ser el peor.
Saludos.
Esta muy bien, me ha venido muy para hacer un trabajo para el instituto gracias por la información.
De nada, Carmen.
La mayoría de lo sreyes que hemos tenido, o eran unos ineptos o eran unos tiranos, o las dos cosas a la vez.
Salvo excepciones, la historia -que es muy testaruda-, nos enseña que de las monarquías, el pueblo ha recibido muy poco. Ya va siendo hora de que la que "disfrutamos" actualmente, se vaya pensando en tomar el camino de Francia, como hicieron sus ancestros. Para ayer, era tarde.