Si hiciéramos una lista con las cuestiones que han influido en el devenir de la historia, en la parte superior de la misma estaría la religión. Centrándolo en el tema del libro del que quiero hablarles hoy, las ideas y las formas del cristianismo han condicionado la vida de millones de personas. Pero ni las ideas ni las formas de ese cristianismo han sido las mismas desde su existencia, ni han surgido sin luchas internas y externas. Es un tema apasionante, sobre el que trata el libro Cristiandad, de Peter Heather (enlace afiliado).
Hace un tiempo les hablaba de los Padres Apostólicos, que son aquellos que tuvieron contacto directo con alguno de los doce Apóstoles. No hay certeza sobre cuántos ni quiénes fueron. Por otra parte, el emperador Constantino no se convirtió hasta el siglo IV, en uno de los hitos de la historia del cristianismo. Estas dos cuestiones dan una idea del tiempo que le llevo a esa religión pasar de ser algo minúsculo y marginal, a configurarse como la clave de bóveda de la sociedad occidental europea. Ese viaje no se hace sin esquivar muchos árboles por el camino, y derribar algunos otros.
El libro se titula Cristiandad, y este término tiene más que ver con los fieles y los países afines al cristianismo, que con la fe
Ese camino pudo haber sido otro, porque la multitud de debates y situaciones, a veces guerras, en torno a esta religión pudieron haber tenido otro final. Muchas de las que hoy llamamos herejías en los libros, podrían haber acabado como la doctrina dominante y haber cambiado todo. Por ejemplo, el misterio de la Santísima Trinidad tardó siglos en ser un dogma, y asentarlo generó no pocos enfrentamientos. Es más, pudo ocurrir que, en cualquiera de esos pequeños fuegos, el cristianismo se hubiera consumido o hubiera vuelto a ser algo marginal. No ocurrió así.
Por supuesto, no seamos ingenuos, en este devenir tienen que ver las creencias, pero más aún el oportunismo, el poder y la conveniencia de unos pocos, de las élites de cada época. Por eso me parece bien elegido el título, cristiandad, en lugar de cristianismo. El primero apunta a las personas, y el segundo a la fe.
Es una historia magnífica. Y, en realidad, es lo que me parece atractivo de este libro. Cómo se fue componiendo la poderosa Iglesia y cómo jugó su partida contra otros, pero, también, en cierta medida, la lucha contra sí misma. La fe y la verdad que hay tras ella, su parte más religiosa, me interesa menos, pero su historia e influencia creo que es algo ineludible para comprender el mundo de ayer y de hoy.
El autor, Peter Heather, es un conocido historiador irlandés y ha publicado sobre la caída del imperio romano y la decadencia de los imperios. Es también catedrático de historia medieval en el King’s College. La editorial es Crítica, y el tratado, que forma parte de su Serie Mayor, ronda las 1.000 páginas. Si bien las últimas 200 de ellas son notas, bibliografía e índice.