Primera edición de Mi Lucha |
Adolf Hitler escribió un libro titulado Mi Lucha, como todos sabrán, donde recogía parte de su biografía, debidamente adornada, y algunas ideas básicas en torno a lo que acabaría siendo su política. Aquella obra acabó generándole millones de marcos y convirtiéndole en un autor de bestsellers.
Cuando estaba preso en 1924, en la ciudad de Landsberg, Hitler escribió el libro en su celda, siendo publicad por la editorial Franz Eher en 1925. De cada ejemplar vendido el autor se llevaba un porcentaje del quince por ciento sobre el precio de venta, que eran 12 marcos. Es decir, cada venta llevaba 1,8 marcos a los bolsillos de Hitler.
El primer año, 1925, se vendieron 10.000 ejemplares, lo que le reportó 18.000 marcos en concepto de derechos de autor. Las ventas fueron de unos 7.000 ejemplares en 1926, 5.600 el año siguiente, 3.000 en 1928 y 7.700 en 1929. En 1930 las ventas subieron exponencialmente hasta los 54.000 ejemplares y también estuvo por encima de 50.000 el número de ventas el año siguiente. En 1932 se superaron los 90.000 ejemplares. Como vemos, todo un superventas.
En 1933 se habían vendido del libro más de 900.000 ejemplares en total, que le habían reportado al líder alemán 1,2 millones de marcos de la época, o lo que es lo mismo, unas setecientas cincuenta veces el sueldo de un obrero cualificado, que estaba en torno a los 1.600 marcos.
Finalmente, en todos aquellos años, el libro reportó en derechos de autor a Hitler la nada despreciable suma de ocho millones de marcos alemanes de la época. Para ser justos, es importante señalar que el gobierno acabó regalando esta obra a todos los recién casados, pagando como es lógico por ella y generando beneficios para el propio jefe del gobierno. Otras de las muchas trampas con las que Hitler se hizo millonario y que repasaremos también en otras curistorias.
jo que listo! bonito regalo de bodas y encima lo pagaban los novios, si no he entendido mal, para que el del bigotito se llevará su parte. Que fuerte me parece.
Sí, no es mala idea. Pero no lo pagaban los novios, sino que era el gobierno, el gobierno de Hitler, el que pagaba el libro que luego regalaba a los novios.
Saludos.
Menos mal que Franco no sabia escribir, pero si dejó unos terrenos a la familia…
Hola Manuel,
Quizás con el tercer libro de Curistoria llegues a esas cifras 😉
Me gustaría que comentases más sobre la Historia de nuestro país; seguro que hay miles de curiosidades.
Enrique, también hizo sus pinitos. Si no me equivoco, ahí está el guión de Raza.
David, hablaré con el gobierno por si quiere comenzar a regalar Curistoria a los recién casados 🙂
E cuanto a los temas, se van alternando sin sentido alguno, así que habrá cosas de España, muchas, como las ha habido antes.
Un saludo.
Franco publicó en 1922, cuando era comandante "Diario de una bandera", en el que cuenta sus andanzas por la Guerra de Marruecos entre 1920 y 1922. Es verdad que no era un gran escritor, pero el libro tiene el valor de ser las memorias de un protagonista de los hechos que se cuentan. Afortunadamente no se regalaba a los que se casaban:-).
Duometri, no tenía yo ese dato en la cabeza, muchas gracias por el comentario.
Saludos.
Otro dato curioso es que Hitler cobraba derechos de imagen por el retrato que ponía el gobierno ¡¡¡en los sellos!!!
Sí, todas sus fotos las hacía la agencia de un amigo suyo, puesto a dedo, y cobraba por ellas. Desde EEUU pidieron una foto a Alemania de Hitler y querían cobrar 30.000 marcos, si no recuerdo mal, por ella. Finalmente se la hizo un reportero un poco traición y todo solucionado.
Saludso.
Creo que el fotógrafo oficial de Hitler tenía algo que ver con Eva Braun. Me parece que ella trabajaba en su estudio, y allí fue donde la conoció. No sé si algún compañero puede confirmarlo.
Si a alguien le interesa el Diario de una bandera: http://www.hvfasgcm.org/Descargas/Diario%20de%20una%20Bandera_libro.pdf
Saludos.
jajajaja te imaginas que todos los dictadores se creyeran de verdad autores de best sellers, de la que nos libramos XD
Gracias por los comentarios.
MALDITO BASTARDO. Listo era, pero un hijo de puta en toda regla