Los políticos a través del caso de Santiago Carrillo

En estos días publica Javier Cercas su nuevo libro, titulado Las leyes de la frontera, que espero leer, pero como siempre voy con retraso estoy en estos días con su anterior obra Anatomía de un instante. En la misma, partiendo de un instante del 23F, el golpe de estado de Tejero, Cercas cuenta y analiza el golpe, la política del momento, los personajes… Es un ejercicio muy interesante, incluso para comprender la España del 2012. Uno de los personajes clave es Santiago Carrillo, que falleció hace apenas unas días, y que si bien no quiero entrar en valoraciones sobre su pensamiento y obras, sirve de ejemplo para reflexionar, treinta años después, sobre nuestra política.

Cita el libro a Fernando Claudín, un estrecho colaborador de Carrillo, que escribió lo siguiente sobre el líder comunista: “Carecía de los mínimos conocimientos de derecho político y constitucional, y no hizo ningún esfuerzo por adquirir algunos. Tampoco era su fuerte la economía, la sociología u otras materias que le permitiesen opinar con conocimiento de causa en la mayor parte de los debates parlamentarios (…) Su única especialidad era la política en general, que suele traducirse en hablar de todo un poco sin profundizar en nada, y la maquinaria del partido, en la que, desde luego, nadir podía disputarle la competencia. Como siempre le había sucedido, no era capaz de encontrar tiempo para el estudio, absorbido siempre por reuniones de partido, entrevistas, conciliábulos, actos de representación y demás actividades de análogo tipo”.

Insisto en lo de no entrar en valoraciones sobre Carrillo y sirva únicamente su caso como ejemplo: sabía poco, opinaba de todo y, eso sí, se manejaba en el partido. Podría uno pensar, y con cierta razón, que saliendo de cuarenta años de dictadura bastante tenían aquellos políticos con poner a funcionar un sistema democrático y sus instrumentos, incluidos los partidos. Pero la cuestión es que si tomamos el nombre de Carrillo y empezamos a poner en su lugar a políticos actuales, muchos de ellos encajan como anillo al dedo dentro del texto de Claudín. Afortunadamente no todos, también es cierto.

Fuente: Anatomía de un instante, de Javier Cercas

2 comentarios en “Los políticos a través del caso de Santiago Carrillo”

  1. Permítame indicarle que, en mi opinión, su análisis es absolutamente incompleto y tan superficial que incluso, y sé que no es su intención, llega a parecerme malintencionado.

    Llama la atención que tras el entrecomillado "insista" en que no quiere hacer valoraciones sobre el personaje. "Excusatio non petita…".

    Seríamos muy afortunados si, en este momento, en nuestros políticos se adivinara sólo un poco de la visión y responsabilidad de estado que demostraron -porque lo demostraron- Suárez, Carrillo, Fraga, Gutiérrez-Mellado o Miguel Herrero, entre otros.

    Al margen de esta pequeña anotación, le felicito sinceramente por la calidad de su página.

  2. Acepto el tirón de orejas, vaya por delante, porque si no se ha entendido bien, es culpa mía. Y me explico.

    La entrada no es un análisis, ya que resumir la vida de Carrillo en una frase es imposible. Sencillamente es, como dice el título, usar su caso, esa frase, como reflexión para nuestro mundo político. Cargado de partidos y vacío de Políticos (con mayúscula). Por otro lado, es cierto lo de "excusatio…", pero es que no era una excusa. Era, o pretendía ser, una advertencia para que nadie arrancara un debate político sobre Carrillo a raíz de la entrada, no iban por ahí los tiros. Podemos encontrar esta opinión sobre Carrillo y cientos que lo ensalzan como gran Político (con mayúscula también). No quiero entrar ahí.

    Dicho todo esto, mil gracias por el comentario, siempre son bienvenidos y celebro que te guste la página 🙂

    Saludos.

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