Galileo, midiendo el tiempo con el pulso

En una ocasión en la catedral de Pisa, Galileo se entretenía viendo cómo oscilaban las enormes lámparas que colgaban del techo, mecidas por las corrientes de aire. El científico tenía por entonces tan sólo 16 años pero ya intentaba comprender y explicar todo cuanto estaba a su alcance.

Se percató de que las lámparas alternaban arcos grandes y pequeños. Sin saber muy bien qué buscaba, Galileo se tomó el pulso y comenzó a contar las pulsaciones que tardaba una oscilación larga y las que se tomaba una corta para completar su recorrido. Le llamó la atención que el número de pulsaciones era similar en ambos casos. Es decir, la lámpara tardaba lo mismo en hacer un arco grande que uno pequeño. Este descubrimiento está relacionado con la llamada Ley de Péndulo.

Pero no es lo más importante, en este caso, el descubrimiento físico, sino la idea de medir el tiempo con el propio corazón, me parece toda una muestra de talento. Eso sí, esperemos que no se le acelerara al comprobar una teoría, porque echaría todo a perder.

Fuente: Momentos estelares de la ciencia, de Isaac Asimov

4 comentarios en “Galileo, midiendo el tiempo con el pulso”

  1. Esta interesante entrada de hoy, Vitike, me ha traido a la memoria otros dos momentos estelares en la medición del tiempo en Roma: el "horologium Augusti", el gigantesco reloj de sol( el más grande del mundo antiguo), mandado construir por Augusto y que utilizaba como gnomon el obelisco egipcio que hoy se encuentra en Montecitorio; y la bellísima Meridiana de Bianchini en la iglesia de Sta. María de los Ángeles y los Mártires, la única iglesia renacentista de Roma, diseñada por Miguel Ángel sobre los restos de las termas de Diocleciano.
    En el primer caso se trataba del expreso deseo de emperador de determinar la duración de los días y de las noches, en palabras de Plinio el Viejo; en el segundo, fijar la fecha de la Pascua cristiana.
    ¡El eterno deseo humano de capturar el tiempo!
    Mil saludos.

  2. Mil gracias amigo por esos datos. No tenía idea del tema de la iglesia, aunque seguro que algo he leído en algún momento. Miguel Ángel me fascina, así que tomo nota para echarle un ojo con calma.

    Un saludo.

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