El fresco del Juicio Final de Miguel Ángel, que casi se merece una sección para él solo en este blog a juzgar por el número de entradas que ha protagonizado, fue criticado desde el mismo momento de su presentación en sociedad, en octubre de 1541. Algunas de estas críticas denunciaban su impudencia e indecoro.
Después de morir el genial artista, la Congregación del Concilio de Trento decidió cubrir las partes más delicadas de los personajes de la obra. En otras palabras, decidió vestir a algunos de aquellos personajes. Esta tarea fue encargada a Daniele Ricciarelli da Volterra, que a partir de entonces es conocido como el Braghettone, que podría ser traducido como el “hacedor de pantalones”.
Bien es cierto que la tarea no la llevó a cabo él únicamente, sino que fue continuada por varios artistas allí donde él la abandonó.
Bueno, mejor eso que poner rectángulos negros o pixelados. 🙂
Finalmente, si estar desnudo fuese natural Dios nos haría nacer desnudos… er, un momento.
Buena teoría esa, sin duda.
Saludos 🙂
Muy buena entrada, el tema es muy conocido, pero lo que realmente no se comenta es en que restauración o en qué año se eliminaron los paños de censura. Fue en la década de los 70'?
Muchas gracias
Que obsesión tienen con el sexo las religiones
Un magnífico sastre, sin duda, este Daniele.