El fuego griego se atribuye a un cristiano sirio llamado Calínico, que nació sobre el 673. Aunque también se piensa que Calínico recibió la idea de químicos de Alejandría. Este fuego era un arma naval que lanzaba un chorro de líquido ardiente, similar a un lanzallamas.
Aunque se uso en el mar, también podía utilizarse en tierra. Esta arma fue durante años mantenida en secreto, y salvo a los bizantinos de ataques enemigos durante ocho siglos.
Los turcos no amenazaron al Imperio Bizantino durante 8 siglos, sino durante (como mucho) 4. Lo que sí es cierto es que les sirvió durante 8 siglos para hacer frente a los intentos de invasión de árabes, turcos, etc.
Enhorabuena por el blog!
Efectivamente, tienes razón. Gracias por la puntualización. Ya lo he modificado.
Saludos.
Me imagino que para utilizar esta arma se debían acercar demasiado al enemigo. eso les debe haber costado batallas en más de una ocasión. Saludos.
Sí, seguramente se tendrían que acercan a cierta distancia, pero parece que si lo usaron tanto tiempo, no le iría mal 🙂
Saludos.