Jasper Newton Daniel, más conocido como Jack Daniel, fue el tipo que fundó la destilería de whiskey Jack Daniel’s, una de las más conocidas del mundo. Nació en 1846, pero nos vamos a saltar toda su vida para ir directos a octubre de 1911, cuando murió.
Llegó una mañana prontito a su oficina y se encontró con un problema que se repetía más de lo que le gustaría al bueno de Jack: no recordaba la combinación de su caja fuerte. Según parece, no tenía buena memoria, aunque no seré yo el que haga chistes sobre este problema y el tema de producir whiskey (vaya, ya lo he hecho).
Enfadado por su mala memoria y por no poder abrir su caja fuerte, pateó con fiereza la caza y se hirió en un dedo del pie. Aquella herida se infectó y acabó llevándoselo a la tumba. Eso sí que es salir de la oficina con los pies por delante.
Curistoria con moraleja: si no recuerdas algo, primero es mejor preguntar, la segunda opción puede ser una copa y tranquilidad; pero lo que nunca debe hacerse es patear cosas, te puede costar la vida.
De acuerdo, pero el PC de mi trabajo a veces funciona a patadas… y las más de las veces a pedales.
Creo que la moraleja de la historia es que nunca hay que patear cajas fuertes XDDD
¿No hubo un director de orquesta al que le pasó algo parecido? Creo que era el así llamado Gran Leopoldo. No pateó una caja fuerte pero sí se cascó el pulgar de un pie y se le infectó, acabando por dejar de dirigir orquestas… definitivamente.
No conozco la historia Jokin, pero sí parece que patear una caja fuerte es una mala idea. 🙂