Los perros de Dios

Lo que hoy voy a relatarles nace de una frase leída en una novela ambientada en el medievo. Todo encaja perfectamente pero no tengo datos para discernir si el hecho es histórico y era común en aquellos tiempos, o sencillamente es una coincidencia, eso sí histórica, pero coincidencia al fin y al cabo. En cualquier caso, allá va.

La orden de los Dominicos fue la principal fuente de inquisidores. La Santa Inquisición, que “preservó” la fe durante años a través de la tortura, el castigo y la búsqueda incansable, y muchas veces injusta, del hereje. La más mínima mácula causaba que los perros de Dios cayeran sobre cualquiera.

Así les llamaban y como tales actuaba: los perros de Dios. Perros de presa, siempre vigilantes y dispuestos a atacar. Ahí reside la curiosidad. Los Dominicos deben su nombre a Santo Domingo de Guzmán. Domingo proviene del latín Dominicus (“del Señor”) y de aquí tenemos Dominicanus que es el nombre en latín de los Dominicos. El juego de palabras al que quería llegar, y al que hacía referencia la novela, es: dominus/canis; donde dominus es “Señor” y canis “perro”. Por lo tanto, no hay mejor nombre para los inquisidores dominicos que los perros de Dios.

22 comentarios en “Los perros de Dios”

  1. Es curioso cómo el término «perros» fue aplicado durante el siglo XVI a los herejes y, fundamentalmente, a los distintos grupos de reformistas. Aquí la aplicación no vino por un juego de palabras del latín, sino por influencia del legado clásico, ligado indefectiblemente a la tradición cínica. El cinismo —como rasgo de asocialidad y de no pertenencia a la comunidad, a la ecclessia— pasó a formar parte del rosario de apelativos dirigidos contra Lutero y los luteranos.

    Y a su vez, los humanistas comenzaron a emplear el término de «perros» contra los teólogos escolásticos precisamente por el carácter depredador de su modo de argumentar.

    Quizás te interese el libro de Hugh Roberts sobre el tema.

    Un saludo.

  2. Además de lo que comentas creía que había otra teoria acerca del apelativo de la orden de predicadores, en concreto que proviene del perro que figura en el escudo heráldico de Domingo de Guzmán y que luego fue utilizado en algunos escudos de la orden junto con el bicolor: el cachorro (de perro; can) con la tea ardiendo en la boca. Pero ahora estoy en duda… Puede ser?

  3. Bueno, la orden se llama, oficialmente «Orden de Predicadores», y después del nombre, escriben OP.

    Igual que los «Franciscanos» cuyo nombre es «Hermanos Menores» o «Hermanos Menores Conventuales». Los «Capuchinos» son «Hermanos Menores Capuchinos».

    Una cosa es el nombre popular, y otro el «oficial».

  4. Aprovechando este famoso juego de palabras -totalmente infundado, y por eso mejor- se puede añadir una anécdota tomada de las hagiografías de San Vicente Ferrer, sin duda el dominico más importante de Europa de la segunda mitad del siglo XIV y principios del XV. Y es la siguiente: mientras su madre estaba embarazada de él, el futuro santo hacía señales y prodigios extraordinarios desde la placenta. Una de estas señales era que… ladraba desde el vientre materno, de forma que todos lo podían oír. Sus padres, preocupadísimos, consultaron a gentes de la Iglesia, los cuales no dudaron ni un momento: el niño nonato estaba llamado a ingresar en la orden de predicadores, a ser un "perro del señor"…

  5. Sobre la relacion de los Dominicos y los perros argumentar que aparte de figurar en su insignia y en su iconografía un perro con una antorcha encendida en la boca la primera biografía de Santo Domingo narra una visión que su madre, la Beata Juana de Aza, tuvo antes de que Santo Domingo naciera. Soñó que un perrito salía de su vientre con una antorcha encendida en su boca. Incapaz de comprender el significado de su sueño, decidió buscar la intercesión de Santo Domingo de Silos, fundador de un famoso monasterio Benedictino de las cercanías. Hizo una peregrinación al monasterio para pedir al Santo que le explicara el sueño. Allí comprendió que su hijo iba a encender el fuego de Jesucristo en el mundo por medio de la predicación. En agradecimiento, puso a su hijo por nombre Domingo, como el santo de Silos.

    un cordial saludo

  6. Partamos de la base de que soy ateo.despues diré que no estoy deacuerdo con el escrito de "los perros de Dios". justamente en este tiempo me estoy documentando sobre el tema, porque estoy empezando a escribir un libro sobre el. Fue a la orden dominicana a la que le encargaron que fundase la inquisicion, uno de los dos encargados de realizar la petición del Papa fue Santo tomas de aquino. Santo Domingo de Guzman fue un hombre honrado y bueno. Pero la iglesia quería más, más patrimonio, más riqueza. en fin cuando lo tenga ya os lo contaré. mientras os invito a entrar en Macerando los sentimientos para combatir el estres. descarga gratuita. saludos

    1. Bastante lejos de la realidad. Cuenta la historia que estando doña Juana embarazada tuvo un sueño de un perro blanco y negro correr con una tea encendida en su boca iba encendido el mundo de fuego. Ella una católica fiel va y consulta en el monasterio de Silos y le dicen que su hijo será luz para el mundo. Éra la madre de Domingo de Guzmán. Domingo iba a pie predicando, se dice que un perro negro y blanco le acompañó. Sus hermanos empiezan a defender la fé y combatir la herejía. De ahí viene el mote Dominus Canis, Perros de Dios. Ya para la época de Tomás de Aquino OP el mote éra harto conocido.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.